Las esponsorizaciones de CESPA estaban en el contrato de la concesión. Valadez y su teoría de la conspiración.

    Otras de las sorpresas más inesperadas de las revelaciones de los últimos tomos abiertos del sumario, nos vienen dadas de la concesión del servicio de limpieza y residuos sólidos a la empresa CESPA, que acabó siendo la adjudicataria. Durante la anterior legislatura, el PES había siempre apostado por mantener la concesión con Acciona, a la cual, además se la debían unos 12 millones de euros. No obstante en mayo de 2008, CESPA, recibe la concesión por parte del nuevo equipo de Gobierno.

      Según los denunciantes, esta empresa habría patrocinado diferentes eventos culturales, como pago o agradecimiento por la concesión, entre otras series de conjeturas que se vierten. Por ejemplo el pago a Enrique González Ceano, de una factura de algo más de 100.000 euros, así como también haber realizado pagos en nombre del Ayuntamiento a Drive Music, entre otras.

      No sabemos qué habrá de irregular y mucho menos de ilegal en ello, pero lo cierto es que tal precepto: el de la esponsorización venía recogido en una cláusula del propio contrato de la concesión donde, según la declaración de Antonio López Soto, Delegado Comercial para Andalucía Oriental, de la empresa de servicios CESPA, que realizó  en calidad de imputado el día 22 de septiembre de 2008 en declaración  "en relación a los hechos que motivan las presentes..."
     En su declaración en la página 477 del Tomo XXI,  López Soto, en respuesta a los investigadores responde que no sólo ha financiado eventos en Estepona; sino también en Granada y Benalmádena. Admitió además que también financió la Semana del Jazz de Estepona.
     Más adelante en la página 483 del mismo tomo el imputado subraya que existe una cláusula en el contrato que obliga a la empresa a tales esponsoracizaciones. Así se recogen sus declaraciones en la citada página:

    

      "PREGUNTADO para que diga si alguna persona del Ayuntamiento de Estepona le ha pedido, directa o indirectamente, a alguna persona relacionada con CESPA, en alguna ocasión, que tenía que esponsorizar un número determinado de eventos o destinar una cantidad de dinero determinada a la esponsorización o patrocinio de
eventos, DICE:
—Que no. En el contrato de adjudicación del servicio hay una cláusula que estipula las cantidades que la empresa deberá destinar a la esponsorizaciones. La cantidad concreta estipulada en el contrato final es de 600.000 euros anuales, que el ayuntamiento destinará según su discreción, a la esponsorización. Al margen de esta
cantidad no le ha sido solicitado ninguna cantidad".

     A partir de entonces ante la insistencia sobre diferentes donaciones por parte de los interrogadores, el imputado le remite a lo "manifestado en la pregunta anterior". Todo parece indicar que la verdadera trama de Astapa fue una teoría de la "conspiración" que obsesionó a los denunciantes junto a intereses políticos personales: un cóctel, nunca mejor dicho, explosivo.